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Preocupa en Bahia aplicación de “Pase Temporal” para foráneos en Jalisco

Una nueva política vehicular del estado de Jalisco amenaza con crear una barrera burocrática en la frontera que divide a  Bahía de Banderas de Puerto Vallarta. La inminente implementación de un control riguroso por parte de las autoridades de Jalisco podría complicar el tránsito diario de miles de nayaritas que cruzan al estado vecino por motivos laborales, educativos o comerciales. Esta medida, enfocada en el Pase de Estancia Temporal, genera una gran incertidumbre en la región.

El Pase de Estancia Temporal es parte del Programa de Verificación Responsable de Jalisco, una iniciativa que busca reducir las emisiones contaminantes de los vehículos que circulan en la entidad. El programa establece un calendario de verificación obligatoria para los autos con placas de Jalisco y, para los vehículos foráneos, ofrece este pase como una alternativa para evitar multas. La regulación, sin embargo, establece una vigencia de 30 días naturales que se pueden utilizar a lo largo de un semestre.

La aplicación de esta política podría volverse obligatoria en los futuros filtros vehiculares. Para un ciudadano que reside en Nayarit y se desplaza diariamente a Puerto Vallarta, el permiso expiraría en poco más de un mes, dejándolo vulnerable a sanciones por el resto del semestre. Esto se percibe como un obstáculo que no reconoce la realidad de una comunidad interdependiente y que podría impactar negativamente en la economía de la región. La multa por omisión puede ascender a $2,078 pesos, una cifra que para muchos representa un duro golpe a la economía familiar.

El trámite para obtener el pase es aparentemente sencillo y se realiza en línea. Los interesados deben ingresar al portal oficial del programa de Verificación Responsable del Gobierno de Jalisco (https://verificacionresponsable.jalisco.gob.mx), ubicar el menú “Mis trámites” y seleccionar la opción “Solicitar mi Pase de Estancia Temporal”. Una vez allí, se debe llenar un formulario con la información del vehículo y del propietario, para finalmente generar un pase que debe imprimirse y colocarse en un lugar visible del auto.

La situación plantea una clara discrepancia: mientras la infraestructura vial une a las entidades, la regulación de la verificación crea una separación funcional. Se espera que las autoridades reconsideren el diseño de esta política para ofrecer una solución más adecuada a la dinámica única de esta conurbación. La falta de claridad en las reglas y su próxima aplicación son motivo de preocupación para los habitantes de Bahía de Banderas que, a diario, contribuyen a la economía de ambos estados.