Clausura Fiscalía fraccionamientos enteros en Bahía de Banderas
La reciente acción de la Fiscalía General del Estado de Nayarit de asegurar diversas propiedades en Bucerías ha desatado una ola de preocupación entre los residentes de subdivisiones como Terralta 1, 2, y 3, Los Amores, Quadrant y zonas aledañas en Bahía de Banderas.
La incertidumbre sobre el futuro de sus hogares ha llevado a numerosos afectados a trasladarse a Tepic en busca de asesoría legal para proteger su patrimonio frente a la posibilidad de perderlo a manos de la banca.
Este escenario en Bucerías se enmarca dentro del ambicioso programa gubernamental conocido como el “Mega Operativo Nuevo Nayarit”. Lanzado en septiembre de 2021 por la actual administración estatal encabezada por el gobernador Miguel Ángel Navarro Quintero, esta iniciativa tiene como objetivo central la recuperación de bienes inmuebles que, según las autoridades, fueron arrebatados de manera ilícita al estado en Bahía de Banderas y Compostela durante sexenios anteriores, particularmente durante la gestión de Ney González Sánchez (2005-2011).
El “Mega Operativo Nuevo Nayarit”, impulsado y coordinado por el Asesor Jurídico del Ejecutivo, Gabriel Camarena, ha identificado, según cifras oficiales, alrededor de 100 propiedades con un valor total estimado de hasta 30 mil millones de pesos, una suma que, se ha señalado, supera el presupuesto anual del estado. Estos bienes recuperados están destinados a un nuevo Fideicomiso Nuevo Nayarit (FINN), que sustituirá al antiguo Fideicomiso de Bahía de Banderas (FIBBA), con la promesa de que los recursos se destinarán a causas nobles como las pensiones y jubilaciones de los trabajadores estatales.
Sin embargo, el operativo no ha estado exento de controversias y desafíos legales. El aseguramiento de propiedades, en ocasiones, se ha llevado a cabo bajo acusaciones de presuntas irregularidades en la cadena de propiedad, como posibles conflictos derivados de la venta de desarrollos a otra constructora, lo que ha resultado en que algunas viviendas quedaran bajo el control bancario. Además, se han reportado discrepancias en los montos pagados por los residentes en distintas fases de los desarrollos, complicando aún más la situación.
La preocupación entre los colonos de Bucerías escaló al observar sellos de aseguramiento en las entradas de sus subdivisiones desde el fin de semana. Aquellos que ya han liquidado el total de sus propiedades están buscando activamente amparos y otras figuras legales para salvaguardar sus bienes y evitar el despojo. Los comités vecinales han prometido mantener a la comunidad informada sobre el avance de los procedimientos legales.
Es importante señalar que el “Mega Operativo Nuevo Nayarit” ha enfrentado resistencia y críticas. Más de 80 familias afectadas ya han obtenido amparos contra los aseguramientos, argumentando irregularidades en el proceso y falta de evidencia sólida por parte de la Fiscalía. Además, la iniciativa ha generado un clima de desconfianza e incertidumbre en el sector inmobiliario y turístico de la Riviera Nayarit, donde inversionistas han denunciado presunto acoso y hostigamiento por parte de las autoridades, deteniendo proyectos económicos de relevancia.
La situación en Bucerías es un claro reflejo de las complejidades y repercusiones del “Mega Operativo Nuevo Nayarit”. Mientras el gobierno estatal defiende su cruzada contra la (presunta) corrupción y la recuperación del supuestp patrimonio público, los ciudadanos afectados se encuentran en medio de una batalla legal para proteger sus hogares, esperando que la justicia prevalezca y se respeten sus derechos. La comunidad permanece atenta a los desarrollos de este proceso legal que determinará el destino de numerosas familias en la costa nayarita.