FRENAN ESTADIO DEL GOBIERNADOR TRAS PROTESTAS
Un juzgado en Nayarit ha dictado una suspensión provisional a las obras de construcción de un estadio de fútbol impulsado por el gobernador Miguel Ángel Navarro, del partido Morena. La decisión judicial llega tras la demolición del complejo cultural Ciudad de las Artes en Tepic, capital del estado, y en medio de acusaciones sobre una estrategia gubernamental para silenciar a la disidencia.
El Juzgado Tercero de Distrito ha ordenado a las autoridades “abstenerse de ejecutar o realizar cualquier acto de demolición, destrucción o deforestación, así como la construcción de la obra pública” en los terrenos en cuestión. Este fallo representa una victoria significativa para el colectivo de artistas, ambientalistas y gestores culturales que se han opuesto tenazmente al proyecto.
La orden judicial se produce después de que se hiciera pública la supuesta directriz del propio gobernador Navarro de desplegar una “fuerte campaña de desprestigio” contra los colectivos opositores. Además, se denuncia el presunto uso de recursos públicos para “pagar medios y artistas” con el fin de legitimar la construcción del estadio. Estas acciones han sido vistas como un intento de coartar la libertad de expresión y de manipular la opinión pública en favor de una obra que genera amplias dudas.
La controversia se agudiza al considerar que Nayarit, un estado con importantes carencias en infraestructura y servicios básicos, no cuenta actualmente con ningún equipo profesional de fútbol. Esta situación plantea serias interrogantes sobre la verdadera necesidad y justificación de una inversión de 300 millones de pesos en un estadio con capacidad para 12,500 espectadores, que, según el propio gobernador, contará con “instalaciones de primer nivel con estándares FIFA”, sin que exista un beneficiario claro en términos de un equipo local.
A principios de junio, el gobernador Navarro dio inicio a la demolición de la Ciudad de las Artes en un acto oficial, argumentando que el estadio llevaría el nombre de Nicolás Álvarez Ortega y fortalecería la infraestructura deportiva. Sin embargo, la demolición de un espacio cultural establecido para dar paso a un proyecto de dudosa utilidad deportiva ha sido ampliamente criticada por colectivos ciudadanos, artistas y ambientalistas. A pesar de múltiples manifestaciones y acciones de protesta, la destrucción del centro cultural se llevó a cabo. Incluso una diputada del partido del gobernador, Beatriz Navarro, se ha sumado a las voces que exigen la detención de las obras.
La decisión judicial de este martes constituye un revés político para el gobernador Navarro, quien ha mantenido silencio ante la creciente controversia. El pasado fin de semana, Navarro organizó una manifestación de sus simpatizantes en apoyo al estadio, la cual fue desestimada por sus críticos como una movilización de funcionarios y trabajadores públicos. La secretaria general del gobierno, Rocío González, designada como intermediaria en la disputa, no ha logrado calmar los ánimos y ha evadido las solicitudes de entrevista, manteniendo un silencio que solo alimenta la especulación.
Para Lissette Álvarez Cazola, gestora cultural y vocera del colectivo de artistas, este fallo es un “hito muy importante como parte del movimiento de resistencia”. Álvarez Cazola considera que es una “muestra de que podemos luchar frente a un Goliat” y reafirma la confianza en la justicia, a la espera de otros dos amparos pendientes. La lucha por la defensa del patrimonio cultural y la racionalidad en el gasto público en Nayarit parece estar lejos de terminar.