CRITICAN lentitud de FISCALÍA ante caso “Mariscos El Rojo”
A casi un mes del trágico atropellamiento que cobró la vida de la señora Mariana de la Luz Hernández Ortiz en el centro de Tepic, la indignación social crece ante la aparente parálisis de las investigaciones.
Pese a que la Fiscalía General de Nayarit, a través de la subfiscal Ludmila Heredia, asumió apenas en horas pasadas el caso de manera mediática, el proceso se ha tornado lento, confuso y carente de resultados tangibles, alimentando la percepción de impunidad en torno a la figura del conocido vendedor de mariscos de la calle e intento de influencer Salvador Hernández, alias “El Rojo”.
El incidente ocurrió el pasado 28 de noviembre en el cruce de la calle Zacatecas y Avenida Victoria. Una camioneta Jeep Rubicon blanca, propiedad del dueño de “Mariscos El Rojo” (claramente la tripula en sus otros videos promoviendo sus mariscos callejeros), arrolló fatalmente a la mujer de 63 años. Aunque el vehículo fue identificado plenamente, el paradero y la identidad del conductor responsable siguen siendo un misterio para la opinión pública.
Salvador Hernández, propietario de la unidad, ha sostenido a través de comunicados en redes sociales que él no conducía el vehículo al momento del accidente, argumentando que lo había prestado a una persona cercana. Sin embargo, su ausencia de redes y paradero desconocido tras el accidente, además de la negativa a revelar públicamente el nombre del presunto conductor, sumado a que en un inicio no se encontraba localizable para la prensa y la ciudadanía, ha generado la sospecha generalizada de que podría haber sido él quien tripulaba la unidad.
Pero la actuación de la Fiscalía ha sido objeto de severas críticas por su lentitud. La subfiscal Ludmila Heredia declaró recientemente que asumió personalmente la investigación al percibir un “posible encubrimiento” y ordenó una reconstrucción de hechos y toma de huellas al interior del vehículo, apenas semanas después de lo ocurrido, cuestionando públicamente las discrepancias en los videos de seguridad.
No obstante, la narrativa oficial se ha desviado hacia temas económicos, con la funcionaria enfatizando que la familia pide una indemnización de 1.4 millones de pesos y que la camioneta está asegurada para cubrir el daño, en lugar de presentar avances sobre la detención del responsable, cuya identidad, de nuevo, es un misterio.
Por su parte, “El Rojo” se ha defendido alegando ser víctima de un “linchamiento mediático”. En un extenso comunicado, aseguró que acudió voluntariamente a la Fiscalía el 29 de noviembre, pero que el propio personal le pidió retirarse para no coincidir con la familia de la víctima, una acción que, de ser cierta, evidenciaría la falta de protocolos y tacto de la institución. Hernández insiste en que ya entregó los datos del conductor a las autoridades, aunque la Fiscalía no ha ejecutado acciones visibles contra dicho tercero.
No obstante, al ser él quien titula la propiedad de la cmioneta, y no existir hasta este momento un conocido implicado por conducirla y protagonizar el accidente, ya debería estar detenido o requerido forzosamente por las autoridades, mas ninguna consecuencia ha tenido la justicia para este conocido vendedor de mariscos que se ha creído influencer.
La gestión del caso por parte de la subfiscal Ludmila Heredia ha escalado a la esfera política. El Senador de la República, Pavel Jarero, emitió una dura crítica contra la funcionaria tras sus recientes declaraciones, calificando el actuar de la institución como torpe y sesgado.
A través de sus redes sociales, Jarero sentenció:
“Con todo respeto para la Subfiscal, su declaración resulta desafortunada y expone, una vez más, una justicia selectiva —particularmente grave cuando la expresión proviene de una mujer y se refiere al lamentable fallecimiento de otra en un accidente de tránsito.
La declaración del senador subraya el sentir de gran parte de la ciudadanía: la justicia en Nayarit parece operar a dos velocidades, mostrándose ineficaz y burocrática cuando hay figuras públicas involucradas, mientras la familia de Doña Luz sigue esperando respuestas claras un mes después de su irreparable muerte.



