Sin consecuencias actos de Karina Polanco. Santana seguirá rotando al personal
Y bueno, pues no pasó nada. Quienes hicieron su pronóstico a favor de la impunidad, le atinaron al premio gordo. El presidente municipal Héctor Santana, prefirió guardar silencio y hacer como que su directora de Protección Civil y ex comandanta de tránsito, Karina Polanco, no le jugó a ser temeraria al volante.
Esta rendición de cuentas que se llevó a cabo, incluso la puso a su costado junto a su ex particular y hoy directora de Tránsito, Johana Barraza. Eso, fue una señal clara de respaldo y perdón hacia sus actos.
Se entiende porque es su cercana amiga y colaboradora, aunque hipócritamente haya dicho en la conferencia que “no porque sean sus amigos les va a dejar pasar todo” y que no todos son sus amigos sino perfiles técnicos, a los que evalúa y exige constantemente.
El que calla otorga. Que hayas tenido una directora de Tránsito que rebase de noche antes de curva en doble línea continua, mientras tiene una mano en el volante y la otra en el celular, y esta sea lo suficientemente bravucona y falta de discreción y respeto hacia su propio gobierno que lo suba de su propia mano a su página de Facebook (ojo, no un medio, no un ciudadano, ella misma se exhibió), no es lo que más preocupa.
Sino el hecho de hasta que grado y que otras cosas está dispuesto a solapar y callar el alcalde, que dice tener intenciones de no perdonar ninguna falta.
Pero Karina Polanco no hará servicio comunitario exhibida en un video del que ni las identidades de los infraccionados protegen, ni tampoco pagará una multa.
Tampoco pedirá disculpas como lo hizo Luis Segura a quien oportunamente exhibimos y callamos de bravucón al infringir las leyes de seguridad vial.
No. De ella, silencio, y a continuar trabajando en la Dirección de Protección Civil. La pregunta es: ¿siquiera aplicará lo que pide a los ciudadanos? La seguridad e integridad de las personas no es un juego. No se puede improvisar.
Ya también Edson Olvera en su momento no dio el ancho en la Comisaría, que hoy por tercera vez está cambiando de titular en menos de un año.
Que no afecta la operatividad de las dependencias en su constante entrega recepción y que él continuará rotando al personal las veces que considere necesario “según les vea áreas de oportunidad” a sus directores, dijo Santana.
No se puede gobernar improvisando directores y perdonando sus fallas. Héctor probablemente tiene mucha calidad moral para pedir al ciudadano, pero debe entender que la mano firme de un alcalde serio también sirve para pedir renuncias.
De momento, ninguna por incompetencia, quizás por miedo al desgaste hacia la imagen de su administración, que igual sufre sus deslices al tener este tipo de episodios.
Esperemos, la directora Karina Polanco no vuelva a manejar así.