REPORTE FINANCIERO DEL 18 DE JUNIO DEL 2025
Hoy tenemos una noticia aparentemente buena: el precio del barril de petróleo de exportación de México se elevó en un solo día en más de 7%, para llegar casi a 68 dólares por barril del crudo.
Incluso los precios del crudo registraron la semana anterior el mayor avance en tres años, ante los ataques entre Israel e Irán, que generaron temores por el suministro del energético, y por un escalamiento del conflicto.
Así, el West Texas, (uno de los principales indicadores de la tendencia del precio del petróleo a escala global), cerró la semana en 72.98 dólares por barril, con un incremento semanal del 13 por ciento, mientras que el Brent se situó en 74.56 dólares, acumulando una ganancia de 12.61 por ciento en los últimos siete días, con lo que alcanzaron su mayor nivel desde febrero de este año.
La semana anterior fue la de mayor incremento para el WTI desde octubre de 2022, y para el caso del Brent desde marzo de 2022. Más aún, los precios del barril Brent de petróleo podrían dispararse en el corto plazo por encima de los 90 dólares de recrudecer la guerra desatada entre Israel e Irán, según ha revelado este lunes Goldman Sachs en un informe al que ha tenido acceso ‘Investing’.
No obstante, en realidad se trata de una mala noticia para la economía mexicana y para la economía mundial, puesto que el aumento del precio del petróleo, que continúa siendo el combustible predominante, además de su importancia como materia prima para todos los productos derivados del plástico, generaría mayores presiones inflacionarias y obligaría a los bancos centrales a elevar su tasa de interés de referencia, lo cual repercute en mayor tendencia al estancamiento e incluso a la recesión económica.
En los próximos días se verá la evolución del conflicto del medio oriente y de la economía global.